Esta canción pertenece a un grupo que no necesita presentación, Coldplay. Ha llovido mucho desde que los vi en La Riviera y aunque apuntaban maneras no parecían capaz de convertirse en lo que por desgracia es hoy, el grupo llenaestadios que aspira a suceder a U2. Pero esto, no nos tiene que nublar la visión. Sus dos primeros discos fueron buenísimos, y luego llegó el bajón con X&Y, y ahora, ahora, han hecho para mí el mejor disco de lo que llevamos de 2008. Sin paliativos. He puesto este "Strawberry Swing", como podía haber puesto "Lost", "42" "Lovers in Japan", etc. Disco plagado de magnificas canciones que llegan para quedarse. Habrá algunos amiguetes que seguro no están de acuerdo conmigo, y eso va por el elitista de Seattle, je,je, pero para mí Coldplay ha parido un pedazo de disco, si señor.
jueves, 21 de agosto de 2008
sábado, 16 de agosto de 2008
Carrera Popular de Seseña
Desde junio hacía que no corríamos y elegimos para volver un lugar discreto, la cuna de Paco el Pocero, el de las ciudades fantasma, el de los proyectos sin fin. Aunque eso es Seseña Nuevo y nosotros estábamos en Seseña Viejo, que todo hay que hay decirlo.
10 km, y mucho calor. Llegamos sobre las 8 y medía de la mañana, poca animación. Damos el paseillo tradicional, charlando con los lugareños tempranillos, y nos apuntamos. 5 euros, demasiado pienso yo, pero ya sabemos que lo que pasa en las grandes ciudades poco a poco es copiado en los pueblos. Es la moda, hay que pegar buenos estacazos, que si no la prueba no tiene caché.
Hay buenos galgos, demasiados para nosotros. Se da la salida en la plaza del pueblo. La animación ha subido bastante. Mi sobrino se marcha por delante intentando seguir a un grupo comandando por un tal Josue del CAP. Mi padre, Ruben y yo vamos juntos, restregándonos el sudor, que aquí todo se comparte. Constan tranquilo, para que correr si soy un tio con suerte.
El recorrido es pesado. Dos vueltas a un circuito que transcurre en su mayor parte por rectas largas de urbanizaciones. En la primera vuelta, mi padre se descuelga y vuelve a enganchar. Mi cuñado no lleva buena cara, y yo no voy mal del todo. Al paso por la plaza, mi padre empieza a descolgarse definitivamente. Llevo delante a un payaso que no hace más que meterse por el centro de las glorietas, y encima se ríe, no se de que. Fui casi toda la carrera detrás de él, le pasé a falta de dos kilómetros, y facilmente corrió 500 metros menos. Tramposo, deleznable.
Mi cuñado se queda en la tediosa subida urbanizada. Yo pongo velocidad de crucero, o al menos eso pienso yo, y voy pasando gente, entre ellos a mi amigo el payasete, que ya era increpado por muchos. El calor ya apretaba bastante, pero yo voy bien. En la segunda vuelta no fui pasado por nadie. Acabé en 47 min. y pico. Mi cuñado entro a unos 40 segundos y mi padre a un minuto y algo.
Mi sobrino que llegó hace una semana de Seattle tras un viaje interminable con paradas en San Francisco y Amsterdam, mal. En el km. 7 tuvo que echar pie a tierra y andar unos metros. Ha venido desfondao el chaval. Esta semana ha empezado a entrenar en condiciones, a ver si es recuperable, je,je.
Y en los trofeos, sorpresón, campanada de mi padre, el veterano del Vietnam, que consiguió la segunda posición en la categoría de más de 55 años, teniendo el 63. Segunda vez que sube al podio y esperamos no sea la última. Enhorabuena.
Y en los sorteos del final, Constan va y se lleva una cafetera. Y luego para el chalet a darnos un bañito, y comentar las incidencias con unas buenas cervezas, que eso es lo que tiene el verano.
10 km, y mucho calor. Llegamos sobre las 8 y medía de la mañana, poca animación. Damos el paseillo tradicional, charlando con los lugareños tempranillos, y nos apuntamos. 5 euros, demasiado pienso yo, pero ya sabemos que lo que pasa en las grandes ciudades poco a poco es copiado en los pueblos. Es la moda, hay que pegar buenos estacazos, que si no la prueba no tiene caché.
Hay buenos galgos, demasiados para nosotros. Se da la salida en la plaza del pueblo. La animación ha subido bastante. Mi sobrino se marcha por delante intentando seguir a un grupo comandando por un tal Josue del CAP. Mi padre, Ruben y yo vamos juntos, restregándonos el sudor, que aquí todo se comparte. Constan tranquilo, para que correr si soy un tio con suerte.
El recorrido es pesado. Dos vueltas a un circuito que transcurre en su mayor parte por rectas largas de urbanizaciones. En la primera vuelta, mi padre se descuelga y vuelve a enganchar. Mi cuñado no lleva buena cara, y yo no voy mal del todo. Al paso por la plaza, mi padre empieza a descolgarse definitivamente. Llevo delante a un payaso que no hace más que meterse por el centro de las glorietas, y encima se ríe, no se de que. Fui casi toda la carrera detrás de él, le pasé a falta de dos kilómetros, y facilmente corrió 500 metros menos. Tramposo, deleznable.
Mi cuñado se queda en la tediosa subida urbanizada. Yo pongo velocidad de crucero, o al menos eso pienso yo, y voy pasando gente, entre ellos a mi amigo el payasete, que ya era increpado por muchos. El calor ya apretaba bastante, pero yo voy bien. En la segunda vuelta no fui pasado por nadie. Acabé en 47 min. y pico. Mi cuñado entro a unos 40 segundos y mi padre a un minuto y algo.
Mi sobrino que llegó hace una semana de Seattle tras un viaje interminable con paradas en San Francisco y Amsterdam, mal. En el km. 7 tuvo que echar pie a tierra y andar unos metros. Ha venido desfondao el chaval. Esta semana ha empezado a entrenar en condiciones, a ver si es recuperable, je,je.
Y en los trofeos, sorpresón, campanada de mi padre, el veterano del Vietnam, que consiguió la segunda posición en la categoría de más de 55 años, teniendo el 63. Segunda vez que sube al podio y esperamos no sea la última. Enhorabuena.
Y en los sorteos del final, Constan va y se lleva una cafetera. Y luego para el chalet a darnos un bañito, y comentar las incidencias con unas buenas cervezas, que eso es lo que tiene el verano.
sábado, 2 de agosto de 2008
How Bizarre (OMC)
Ya inmersos en pleno verano, en el mes de agosto, y sin saber todavía si me voy o no de vacaciones, dejo la que para mi es una canción veraniega por excelencia. Ya tiene sus años, y me ha costado encontrar el titulo y quien la hizo, pero tras un arduo trabajo lo conseguí. La canción se llama How Bizarre y es de OMC del que desconozco todo. Combina un hip hop suave y facilón con un estribillo de películas de Chevy Chase. Para llevar en un descapotable, por la playa y con camisa hawaiana.
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