viernes, 22 de junio de 2007

10 km de Carabanchel y 10 km San Antonio de la Florida

Tras casi dos meses sin competir, y sin entrenar debido a mi nueva faceta progenitora, y con el mal recuerdo de mi paso por el mapoma, volvimos a una carrera nueva para mi, los 10 km. urbanos de Carabanchel. Perfil durillo, aunque la mañana del domingo se presentó con un clima ideal, lo que hacía más apetecible volver a calzarse las zapatillas.
De salida fui bastante cuadrado, bastante tenía con seguir a mi padre. Mi cuñado se quedo por detrás, listo que fue. En el km 6 nos alcanzó y fuimos los tres juntos, hasta el ultimo kilómetro donde los piques hicieron acto de presencia. Acabe en 46,55 algo mejor de lo esperado. A veinte segundos entró mi cuñado y a otros veinte mi padre. Antes en el Km. 8 habíamos encontrado a mi sobrino completamente fundido ¿ la novia, los exámenes?, cualquiera sabe.
Una semana más tarde fuimos a los 10 Km. de San Antonio de la Florida, segunda vez que la corría, conservando buenos recuerdos de la primera. No hacía calor, y llovía intermitente, genial. Durante la semana no había entrenado nada, y estuve trabajando todo el fin de semana, ya empezamos con las excusas. Pero no, la carrera se me dio muy bien. Corrí de menos a más, saliendo a 4.38 el primer km. Sabíamos que había dos subidas fuertes con lo que no se podía hacer demasiados alardes al principio. Salimos Toñin, mi padre y yo juntos. Toñin se fue por delante en el km 2, pero tras la primera subida que la hicimos contentos, pero sin presumir, le alcanzamos. Empezamos a incrementar poco a poco el ritmo, quedandonos solos mi padre y yo, aunque acompañados de una lluvia torrencial que nos acompañaria hasta meta, haciendo que las sensaciones se multiplicaran. Al final acabe con 46.35, tiempo oficial, detrás entro mi padre con 46.55, mi cuñado con 48.23 y Toñin con 49.04, de los demás ni hablamos.
En resumen, buenas carreras para no perder del todo la forma en este periodo tranquilo, el calor dentro de poco empezará a apretar y las ganas de correr a disminuir, ya vendrán tiempos mejores.

Time (Kim ki-duk)



Seh-hee y Ji-Woo son una pareja aparentemente feliz, pero los celos enfermizos de ella y su miedo a no sentirse deseada y a ser abandonada, la lleva a desaparecer y a cambiarse el rostro. Pasados dos años en los que Seh-hee ha estado desaparecida, Ji-Woo vuelve a enamorarse de una joven desconocida...

Con este argumento, el gran Kim Ki-duk reflexiona sobre como afecta el paso del tiempo en las relaciones, sobre el amor más allá de la apariencia física. Y lo hace sirviéndose, como siempre en su filmografía, de personajes al borde del cataclismo existencial. Aquí reina la angustia, pero todo está impregnado de un realismo mágico capaz de producir sensaciones encontradas.

Con Time nos encontramos ante la enésima genialidad del maestro. Sin llegar a las cotas sublimes de Primavera, Verano.. ni a la brutalidad de La Isla, ni al hipnotismo poético de Hierro 3, Time es un nueve en un mundo de cuatros y cincos. Probablemente es la película más accesible del director coreano, alejándose de los escenarios naturales con silencios infinitos, aunque sigue habiendo escenas de extraordinaria belleza como las rodadas en el llamado parque de las esculturas, rodado en la isla de Mo en Corea.

Ya estamos esperando ansiosos su nueva obra, Breath, y es que con Kim ki-duk nos encontramos ante el director más fascinante de lo que llevamos de siglo. Esperamos que no se lo trague Hollywood y siga el camino de Wong Kar-Way.

viernes, 8 de junio de 2007

Half Nelson



La verdad es que albergaba dudas sobre esta película. Había leído cosas como que era un club de los poetas muertos independientes, pero afortunadamente Ryan Gosling me las ha despejado. En su papel de profesor colgado del crack al borde del precipicio está mucho más cerca del Edward Norton de American History X que del petardo de Robin Williams.
Half Nelson es el nombre que se le da a una llave de lucha libre, por la cual se inmoviliza al contrario, infringiéndole una derrota segura. El título es una metáfora de la situación en la que se encuentra Dan (Ryan Gosling), joven profesor de historia aficionado en sus ratos libre y en los no tan libres a "flotar en el espacio". Cuando una alumna suya, Drey (Shareeka Epps) le descubre, se establece una relación entre ambos no muy definida ¿admiración, amor...?
Ryan Gosling, actor al que descubrí en El Creyente, obtuvo su primera nominación al oscar por este papel. En la complicidad que establece con el personaje que interpreta Shareeka Epps están los cimientos del film. Es destacable la interpretación que hace ésta, muy alejada de los típicos y cursis niños norteamericanos. Me encanta la transición que hace del gesto serio a la sonrisa. Sabe transmitir dureza y ternura al mismo tiempo.
Half Nelson es indulgente con sus personajes, y lo que en otras películas sería sinónimo de pastel, aquí se agradece. La verdad es que no apetece odiar a nadie en esta película.