Después de tirarme dos años entrenando poco y mal, por culpa de las oposiciones, cambio de vivienda y demás, había pensado que este iba a ser mi año. Y dentro de este mi año, lo había planificado para llegar a tope en tres fechas diferentes:
- 15 de noviembre 2015: Carrera de las Aficiones, donde intentaré batir mi marca de 41,49 que lleva desde el 2013. Superar también el 41,42 de mi cuñado, ya sería la carrera perfecta.
- 31 de enero 2016 : Medio Maraton de Getafe. Intentaré batir mi marca de 1:33,33 y el 1:33,16 que tiene mi cuñado. Estas marcas son del 2011, casi nada. Se da una cosa curiosa con mi cuñado y conmigo. Llevamos diez mil años corriendo y tenemos los mejores tiempos en las mismas carreras y los mismos años.
- 24 de abril 2016. Maraton de Madrid. Intentar bajar mi marca de 3:55,23 que es del 2009. Aquí también mi cuñado tiene mejor marca que yo.
Pues en estas estamos en la temporada y desde la pretemporada que hice con mi sobrino, he marchado bastante bien. Estuve en 44 largos en la Carrera de la discapacidad y en 43,11 en la del Csic que es mucho más dura que las aficiones. He seguido entrenando bien, pero estas dos últimas semanas han sido desastrosas. La semana pasada, Marco estuvo enfermo toda la semana. Salí poco y mal a entrenar, quedandome frio, porque luego tenía que recoger a Lucas de la Academía, y está semana el que está hecho una mierda soy yo. Con una conjuntivitis de conejo, multitud de mocos y encima me han dicho que me tienen que operar del tabique nasal porque respiro como el culo, y este mismo lunes ya tengo cita en el hospital, asi que no acudo en las mejores condiciones a esta prueba que es la primera gran cita de la temporada. Intentare salir hoy a rodar 5 km suaves y ya está, la suerte esta echada.
Dicho esto, todas las excusas puestas sobre el papel, lo daré todo, y el objetivo sigue estando ahí, aunque lo veo lejano, muy lejano...
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