Pues vaya si lo refrendé. Incomprensiblemente he vuelto a mejorar mi marca dejándola en 42.43 y esta si que es oficial. Y digo incomprensiblemente porque la noche antes no se me ocurrió otra cosa que pinplarme 3 cubatas, abundante vino de Galicia, un carajillo y un chupito de licor de hierbas. Todo eso aderezado con pulpillo y unos pimientos de padrón que explotaban dentro cual bombas lapa.
Pero por lo que se ve, el alcohol hizo funciones de gasolina y yo la llevaba super, de la marca Ballantines.
Puse el despertador a las 8 de la mañana y a las 7 ya me desperté con síntomas resacosos. Me tome una tostada y un batido de fresa y fui dos veces al servicio. A esto había que añadir un notable mareo que mitigué en parte pasando bajo la ducha.
Con esta disposición y muy pocas ganas me dispuse a correr, pero fue dar la salida, empezar a sudar y a disfrutar. Pase el primer km. en 4.08 y fui manteniendo más o menos ritmos cercanos a 4.15. Fuimos mi padre y yo toda la carrera juntos. A mi sobrino le tuve a vista hasta el km. 5, pero a partir de ahí el empezó a moverse en 3 y pico por km, para acabar en unos esplendidos 39.20. Mi cuñado lo hizo en 43.40 marca personal también.
Un recorrido donde las mayores subidas eran los badenes de los coches y una organización ejemplar. Calles anchas y una participación de unas 500 personas que te permite dedicarte a correr y no a esquivar personas o coches como pasa en cada vez más carreras multitudinarias con afán recaudatorio.
A diferencia de la semana pasada en Alcalá donde tuve mis momentos críticos aquí disfrute en todo momento, llegando a alcanzar en determinadas ocasiones la mítica "zona".
Todos nos vamos afinando poco a poco. Este ultimo fin de semana he llegado ya a correr 18 km y medio, corriendo los últimos 5 km. a 4.30, y con unas sensaciones inmejorables. La próxima cita el 28 en Villaverde, Medio marathon.
Pero por lo que se ve, el alcohol hizo funciones de gasolina y yo la llevaba super, de la marca Ballantines.
Puse el despertador a las 8 de la mañana y a las 7 ya me desperté con síntomas resacosos. Me tome una tostada y un batido de fresa y fui dos veces al servicio. A esto había que añadir un notable mareo que mitigué en parte pasando bajo la ducha.
Con esta disposición y muy pocas ganas me dispuse a correr, pero fue dar la salida, empezar a sudar y a disfrutar. Pase el primer km. en 4.08 y fui manteniendo más o menos ritmos cercanos a 4.15. Fuimos mi padre y yo toda la carrera juntos. A mi sobrino le tuve a vista hasta el km. 5, pero a partir de ahí el empezó a moverse en 3 y pico por km, para acabar en unos esplendidos 39.20. Mi cuñado lo hizo en 43.40 marca personal también.
Un recorrido donde las mayores subidas eran los badenes de los coches y una organización ejemplar. Calles anchas y una participación de unas 500 personas que te permite dedicarte a correr y no a esquivar personas o coches como pasa en cada vez más carreras multitudinarias con afán recaudatorio.
A diferencia de la semana pasada en Alcalá donde tuve mis momentos críticos aquí disfrute en todo momento, llegando a alcanzar en determinadas ocasiones la mítica "zona".
Todos nos vamos afinando poco a poco. Este ultimo fin de semana he llegado ya a correr 18 km y medio, corriendo los últimos 5 km. a 4.30, y con unas sensaciones inmejorables. La próxima cita el 28 en Villaverde, Medio marathon.
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