The Human Race

!Menudo fin de semana!. Primera vez que doblo en mi vida, el sábado carrera por la tarde en Mocejón, pueblo que vio nacer a mi madre, y el domingo The Human Race, la ególatra carrera de Nike revestida de solidaridad.

Empezamos por los pobres. Mocejón (Toledo), 19 horas, mientras las bodas acaecen en la iglesia del pueblo un grupo de gente nos disponemos a correr unos 6 km. Mi sobrino antes había disputado en su categoría y había quedado segundo. Tras ir con otro del Castilla La Mancha, no le pudo aguantar el ritmo en la última vuelta. Pese a todo buena carrera y a ver si explota de una vez. Y luego la carrera general, con una participación de mucho nivel, ahí se veían ganadores de Seseña, Pantoja, 3º de Pinto, Bikila. Nosotros eramos mi cuñado, Nachete que se va aficionando, mi sobrino que hacía dos pruebas seguidas, y yo. Cuatro vueltas a un circuito no muy duro, y me lo pase pipa. Salimos los últimos y fuimos los últimos casi toda la prueba. Nos doblaron. Otra forma de vivir una carrera, corriendo desahogado, todos juntos, haciendo bromas, y pasándolo bien. Y para el final quedará para la historia el sprint deNacho que nos pilló a traición y nos ganó a todos.

Y el domingo por la tarde, The Human Race, salida en el Retiro Madrileño. Sólo íbamos mi cuñado y yo que nos habíamos apuntado gratis al haber comprado unas Nike. El precio para los demás, 20 euros hacía la prueba prohibitiva. Mucho pijerio y dominguero entre los participantes, que superaron las 10.000 personas según cifras oficiales. Pero la verdad es que la salida estaba bien organizada. Bebida isotónica, agua, música de The Pinker Tones y Santi Millan amenizando y dando ánimos. Me siento en el césped escuchando ganar al Getafe en su primer partido de liga esperando a que den la salida.

A las 20:00 horas nos ponemos en marcha. Pese a que íbamos en cajones (menos de 48) se hace difícil correr. Vamos a tirones, esquivando otros corredores más lentos, con lo que es muy difícil adquirir un buen ritmo de carrera. Tras la salida del Retiro se pasa por Menendez Pelayo y nos volvemos a meter en el Retiro. Pasamos por la estatua del Ángel Caído, y en marcha para Neptuno. Km.3 14 minutos. No llevo muy buen tiempo para lo deprisa que vamos. Así no hay quien corra. Pasamos delante del Congreso de los Diputados del que me había olvidado durante mi mes de vacas, y nos metemos ya en lo mejor de la prueba, Puerta del Sol, Mayor, Palacio Real. La verdad es que es una gozada. Mi cuñado ya se había desprendido subiendo la Carrera de San Jerónimo y marcho sólo. Voy muy rápido o al menos eso creo. Pero los tiempos no acompañan. Frenética bajada y para la Casa de Campo donde transcurren los dos últimos Kilómetros y una última subida que nos lleva al Pabellón Arena. Esta hace daño y mucho. Acabo en 46:46, bastante cansado. Mi cuñado lo hace un minuto más tarde.

Y luego...el caos. Gente por todos sitios, buscando bebida, barritas, etc. Mi cuñado cogió una caja y cogimos todo lo que nos entró. Ya se que no se debe hacer, pero como Nike tiene mucho dinero pues seguro que no les importa. Salir del recinto era una tarea casi imposible, con la marea de gente que entraba. Parecíamos prisioneros de los " conciertazos " de Nena Daconte y su puta madre. Y en otras ciudades Ben Harper, Kanye West.. Los españoles somos los más gilipollas de todos.

Bueno, pues nada, conseguimos salir, y para casa con el botín que habíamos obtenido. Una marca peor de lo esperado para el esfuerzo realizado, (aunque luego he leído que daba unos 250 metros de más) que eso sería equivalente a un minuto menos. Y una carrera demasiado pija, con un recorrido espectacular pero sin el encanto de las pequeñas pruebas que se hacen con mucha ilusión y sacrificio. Y lo peor de todo es que te obligan a correr con su puta camiseta dorsal que a mi me raspaba por todos lados, con lo que me tuve que poner una de algodón debajo y me asaba de calor.

Es la aldea global. Is The Evolution, Baby.