CARRERA POPULAR MELONERAS

Sábado por la tarde, 30 grados, y ahí estamos, preparados para correr los 8 km. y pico de esta multitudinaria carrera popular (esta si es popular).
El año pasado reventé y sufrí mi primer y único abandono hasta la fecha en una carrera. Así que este año tranquilo, que el hombre es el único animal que tropieza dos veces. La intención es correr de menos a más, lo que siempre se dice pero que tan pocas veces se hace.
El recorrido volvía a sus orígenes . Salía de Méndez Alvaro y llegaba al Parque de Arganzuela, cerca del maravilloso entorno natural de la M-30.
Primero salió la muchachada. De ahí es la imagen que he puesto, donde se ve a mi sobrino mirando no se a quien, pero parece interesante. A mi nadie me hace fotos, por eso no las pongo. Fueron 753 pequeños atletas listos para comerse los 4 km. del recorrido y a fe que algunos se los devoraron. El ganador total hizo 12 minutos. Rubén acabo en poco más de 14 minutos, y luego en la clasificación le hicieron la cuca. Primero le pusieron 5º, luego 6º, y al final cuando le llamaron para el podio, 7º. Poca seriedad, aunque para el premio que daban lo mismo da.
Nosotros íbamos como la banda del moco, feos y pocos. Mi cuñado, Toñín, Constan y yo. De salida, fuimos los tres primeros juntos, y por el km. 2 nos dimos la primera sorpresa, ya que nos encontramos a Constan que iba por delante. Ahí que tener cuidado con él que un día nos la lía. Poco a poco, Toñín y yo fuimos distanciándonos a un ritmo de 4m 50s el km, así hasta llegar al km. 5 donde con las primeras subidas, Toñín las acusó y se quedo por detrás. Yo con bastantes reservas porque ese día no me apetecía la soledad, me fui soltando, y alcance momentos bastante buenos de velocidad, sobre todo cuesta abajo, je,je. Al final llegue a meta en 40 minutos. Mi cuñado llego en 42, y Toñín en 43. Nos dieron una rajita de melón y la misma camiseta de todos los años. Como veis bastante cutre todo. Ya van tres años seguidos comiendo melón por estas fechas y me parece que el año que viene habrá que buscar otra carrera que la sustituya.

DEATH PROOF (8/10)

He visto el programa entero "Grindhouse" tal y como nos la han querido vender la pareja ( Tarantino y Rodriguez ). De Planet Terror, me ahorro el comentario. Me parece intrascendente, sosa, sin chispa. Con Quentin la cosa cambia.
El pobre Robert Rodriguez no tendría que hacer filmes para que se vieran conjuntamente con los de su colega. Uno es el amigo gracioso y pesado que no se come nada y acaba siempre borracho y el otro es el guaperas que todas las noches duerme acompañado, aunque llamar a Tarantino guaperas resulta un poco osado. Rodriguez lleva toda la vida haciendo lo mismo, vampiros, extraterrestres, zombies y aunque en algunos momentos ha divertido, ya cansa. Tarantino empezó con dos obras maestras "Reservoir Dogs" y "Pulp Fiction", y luego ha venido haciendo lo que le ha dado la gana, pero siempre cambiando, reciclándose, buscando nuevas formas inspiradas en sus viejos maestros, Leone, Don Siegel..
El argumento de Death Proof es simple. Un asesino implacable, a lomos de su coche de especialista "a prueba de muerte", busca chicas para matarlas. No tiene pasado, no tiene razones. En una primera parte el encuentro con las chicas acaba de forma brutal, entendiendo el choque como la culminación del acto sexual. El ritmo del segundo encuentro lo marcan las chicas, más sensual a bordo de su Dodge Challenger del 70. Son dos formas de sexo, fetichismo de pies y baile de la mariposa incluido y en las dos disfruta el especialista Mike.
Por lo demás, en esta película volvemos a elementos recurrentes del universo tarantiniano, ya vistos y mencionados en otras películas, como las hamburguesas kajuna, o la furgoneta que llevaba Uma Thurman en Kill Bill. Además nos encontramos con otro actor resucitado, Kurt Rusell, aunque a mi me parece que se encuentra a años luz del John Travolta de Pulp Fiction. Persecuciones de coches de treinta minutos, diálogos afilados, y situaciones un punto horteras. Tarantino sigue en forma.
Lo mejor: La intención de recuperar una clase de cine ya descartado.
Lo peor: ese final, un malo malote como el especialista Mike no se merecía acabar suplicando clemencia ante sus tres víctimas. Hay que morir con dignidad como Vincent Vega en Pulp Fiction.

RATATOUILLE (9/10)

Me ha fascinado Ratatouille. Me he sentido como Mr. Ego, cuando prueba la última creación de la rata Remy. Al igual que le sucede al critico gastronómico , Ratatouille te produce una explosión de sensaciones. Es una película indispensable. Y eso que tenía miedo, ya que después de todo lo bueno que había leído sobre ella, siempre planea la sombra del no es para tanto. Pero esta vez no. Es para mucho más.
Nos encontramos ante una de las cimas de la animación de todos los tiempos. Es la película más refrescante vista por mi en años. Acostumbrado últimamente a repeticiones predecibles de éxitos comerciales tipo Shrek 3, Ratatouille es un punto y aparte.
Cine de calidad, sin fiarlo todo a los prodigios técnicos de la animación. Se arma con un guión espectacular alejado de los diálogos tontorrones y momentos pastel propios de la animación de antaño, y unos personajes coherentes y resultones. De entre todos ellos me quedo con el chef Skinner, sublime y torpón malvado que nos recuerda al añorado Pierre No Doy Una.
En definitiva, una película para disfrutar y dejarse llevar por las calles de París de la mano de esta simpática y soñadora rata que ansia convertirse en chef.
Lo mejor: la persecución en vespa del chef Skinner, genial.
Lo peor: que haya quien piense que sólo es "otra" peli de dibujos animados.

TURISTAS (4/10)

Pobre Brasil! Primero fueron Los Simpson y ahora esta película nos quita las ganas de ir a este fascinante país. No experimentéis cosas nuevas, porque mil peligros os acechan allí. Hay que coger el avión, nunca el autobús, ya que si lo haces, puede que te pille un medico loco y te saque los órganos uno a uno. ¿ El porqué ? Es tan irrisorio que no merece la pena ni decirlo. El argumento se las trae, de malo, claro.

Y sin embargo, yo recomiendo verla. Todos tenemos algún día que te apetece ver algo sin pretensiones de inmortalidad, y Turistas no aburre. Y si la puedes ver con unos amiguetes y unos litros de cerveza mejor. Seguro que te salva la tarde.

Hostel va creando imitadores. Aquí se le añaden unos toquecitos de La Playa, si, la de Dicaprio, y lo demás, lo típico: buenos paisajes, exuberantes chavalas y caipirinha para todos. Y luego el médico sacaorganos.

Se podría decir que abusa de las escenas acuáticas, que el argumento es delirante o incluso que tiene méritos, como la creación en determinados momentos de ciertas dosis de angustia, pero para qué?. Lo mejor es verla, pasarlo bien, y olvidarla cuanto antes.

Lo mejor: Las playas, las chicas, las chicas, las chicas, ah, y las chicas.

Lo peor: Que el director se la ha tomado demasiado en serio.

10 km-Circuito Mapoma Illescas

Tras un mes de relax y sin que entrara en mis planes, ya que el debut de la temporada iba a ser en la "Meloneras", adelante mi puesta de largo a los 10 km. de Illescas, carrera que quien la ha visto y quien la ve. Antes eramos 4 gatos, y desde que la cogió Mapoma, es una de las carreras con mayor nivel que conozco.
Nosotros íbamos en cuadro; mi cuñado y yo. Allí nos encontramos con Maxi que también se había animado. Nada más llegar vimos en un coche al recordman de maratón español, el toledano Julito Rey, con lo que mis opciones de triunfo se redujeron notablemente,je,je.
Mi sobrino competía en la categoría de cadetes y el comienzo de la temporada no ha podido ser mejor para él. Ganó en una carrera que domino de principio a fin, templando al principio con los clásicos kamikazes que no saben correr, y sintiéndose amenazado sólo al final, donde un brutal cambio de ritmo alentado por su amigo Navchenko, colocó las cosas en su sitio. Parece que los entrenamientos del mes de agosto con el maestro Constan van dando sus frutos, y esperamos que esta pueda ser su temporada.
En cuanto a nuestra prueba, el recorrido estaba dividido en dos tramos, el primero benigno sobre asfalto, recorriendo el pueblo de Illescas que tan gratos recuerdos de la adolescencia nos trae a todos, y el segundo ya por caminos, bastante conocidos por mi, al ser lugar habitual de entrenamiento, por lo que era conocedor de la ratonera en que se convertirían esos últimos kilómetros.
Mi cuñado y yo salimos juntitos, para así poder compartir las penurias previstas. No esta la cosa para hacer alardes. Así fuimos hasta la mitad de la prueba donde él empezó a aflojar y yo a recoger cadáveres andantes. En pocas carreras he visto tanta gente destrozada, y no eran domingueros, la mayoría de clubs de atletismo. El verano hace estragos y no me refiero al calor.
Acabe en 49.13 en el puesto 377 con buenas sensaciones, algo sumamente importante en las fechas que nos encontramos. Mi cuñado entro en 51.49 en el 451 y Maxi en 56.42 en el 553. En total acabaron 606 corredores. La bolsa que dieron magnifica, con tres camisetas, dos de ellas adidas, con lo que para tres euros que costaba es una de las carreras mejor amortizadas del circuito. Ah! y barra de cerveza gratis para todos.
Bueno, ya estamos inmerso en los meses donde hay que ir cogiendo la forma. El calendario viene cargado. 15 septiembre -Meloneras; 30 septiembre -Alcalá de Henares 11km; 7 octubre -10 Km. Getafe con intento de hacer marca personal. ¿Lo conseguiré?. Ya lo dijo Dylan, la respuesta, amigo, está en el viento.

CONCURSANTE (6/10)

Martín Circo Martín (Sbaraglia) ha muerto. Aferrado a un maletín en el que guarda lo poco que había conseguido mantener a salvo de banqueros, especuladores y demás tiburones. Atrás queda la efímera felicidad tras haber obtenido 500 millones de pesetas en un concurso, el mayor premio dado en la historia de la TV. Lo que era un sueño, acabo en pesadilla, pero no hubo despertador que lo arreglara.
La opera prima de Rodrigo Cortes es arriesgada, sobre todo en su planteamiento formal. De un modo nervioso y a ratos esquizofrénico, va diseccionando las entrañas del sistema financiero mundial. El protagonista cae en una telaraña, en la que cada movimiento se convierte en un paso más a la ruina tanto económica como física.
Pese a sus indudables aciertos formales (música y ritmo argumental muy cuidados), Concursante se muestra lejana. Me hubiera gustado verla en manos de Alex de la Iglesia contando con un actor más castizo como Guillermo Toledo o incluso Fernando Tejero. A lo mejor el resultado no hubiera sido tan cool, pero seguro que hubiéramos tenido una película más cercana, campechana dicen las madres.
Lo mejor: la escena en la que el personaje de Chete Lera explica a Martín como funcionan los créditos sirviéndose de un tablero de ajedrez.
Lo peor: El trazo grueso de algunos personajes, como el del asesor Sr. Pizarro, que parece sacado de las viñetas de Mortadelo y Filemón.

Trofeo San Lorenzo (10600 m)

Con un mes de retraso escribo mis impresiones sobre esta "mítica prueba" en la que el calor y el recorrido causó estragos, por lo menos en mí. Segunda vez que la corro, y segunda vez que llego cascado , aunque esta vez las sensaciones fueron mucho peores. Será la edad o las responsabilidades paternas.
La salida confusa, sin alfombra de chip, ni siquiera una linea marcada en el suelo con tiza, como se ha hecho siempre. Todos en tropel, y maricón el último. El grupo que íbamos presentó dos bajas de última hora, mi cuñado el currante, y Toñin el fiestero. En total íbamos siete personas: Constan, el pinturas, Maxi peluquero, mi padre, Ivan (compañero de trabajo), mi sobrino (incorporación de última hora) y yo.
Nada más salir, mi padre se escapa, y nos quedamos por detrás Ivan, mi sobrino y yo. Los demás se lo tomaron con más tranquilidad todavía. Así vamos hasta el Km. 2, donde mi sobrino se va para adelante, y un km. más tarde me despido de Ivan con un escueto levantamiento de mano. Corriendo sobran las palabras. Así que estábamos en el km. 3, empezando unas cuestas de infarto, y cada uno por su lado. A esto se le llama trabajar en equipo. Así da gusto, joder.
A mi sobrino le fui teniendo a la vista, hasta el km, 5, en el Palacio Real, donde todavía pensaba que le podía coger. Al final lo que cogí fue un ritmo cansino dominguero, y unas ganas locas de pararme y tomarme una cerveza bien fresquita, pero afortunadamente mi "orgullo y mi pundonor" me hicieron llegar a meta con bastante más pena que gloria. Por delante mi sobrino alcanzó a mi padre, le vio y se fue. Ten nietos para esto, que no se quedan ni a ayudarte en los últimos kilómetros.
Luego, recogida de bolsa, paseo fugaz por el Rastro, y a bebernos unas cervecitas que bien ganadas las teníamos.
Rubencín: 337 : 51.27
Ángel: 387 : 52.31
Yo: 412 : 53.19
Constan: 611 : 58.20
Pinturas: 621 : 58.41
Maxi: 802 : 1.04.40
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